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domingo, 7 de noviembre de 2010

Libros sin palabras

Estos libros del Premio Andersen de Ilustración 1984, el autor japonés Mitsumasa Anno son la mejor muestra de que "una imagen vale más que mil palabras" y si bien ambas cosas no son excluyentes, esta obra que procede de sus viajes por Europa es importante para que los lectores, a partir de los 9 ó 10 años, puedan descubrir poco a poco los lugares y elementos más importantes de nuestra cultura.
El protagonista es un peregrino al que hay que buscar y encontrar, viendo con paciencia el recorrido que hace.
¿Serán todos los lectores capaces de reconocer cada elemento?
Son libros adecuados para trabajar con adolescentes.

Mitsumasa Anno: El viaje de Anno, Barcelona: Juventud, 1979

" Mitsumasa Anno: El viaje de Anno (II), Barcelona: Juventud, 1986







Mitsumasa Anno: Anno's Spain , New York: Philomel Books, 2004
Este último libro está centrado en España, a pesar de que aquí no ha sido editado.

5 comentarios:

  1. Este libro hecho tan solo con ilustraciones me ha llamado la atención y me parece muy útil para niños de todas las edades. Concretamente este que habla de sus viajes por Europa lo enfocaría a niños de entre 10-12 años para dar de alguna manera de una forma lúdica la geografía, por ejemplo. Así de esta manera el alumno podrá ver cosas importantes (como pueden ser edificios significativos o la propia cultura) que hay en cada lugar sin leerlo en ningún sitio.
    Además, con este tipo de libros también trabajaría en Educación Infantil, pero enfocado de distinta manera. En Infantil sería adecuado tener libros con ilustraciones del trascurso de una historia para que entre todos los niños puedan inventarse una historia y contarla en clase.


    Sonia Cano Cortázar
    Educación Infantil, Grupo 211
    Universidad Autónoma de Madrid

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  2. Es una manera curiosa de ilustrar y enseñar distintos lugares del mundo, tal como dice la entrada (aunque no estoy muy desacuerdo) una imagen vale mas que mil palabras.
    Es cierto que es una manera más divertida para los niños de aprender sobre el panorama de diferentes países.

    Pablo Lagares Rivas
    2º Magisterio Primaria
    Grupo 222

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  3. Lo primero que ha venido a mi mente cuando he visto el título de la entrada, es esa imagen mía, cuando aún no sabía leer, y me dedicaba a mirar los dibujos de los cuentos inventándome las historias a través de las imágenes, este recuerdo me hace pensar lo importante que puede ser un libro sin palabras, porque aunque en mi caso no sabía leer, y aparentemente no lo hacía en realidad estaba leyendo imágenes, porque leer, no tiene porque ser soló la lectura de palabras.
    Pienso que sería interesante mostrar este tipo de libros, a mi parecer muchas veces olvidados, a los alumnos, puesto que el hecho de que no tenga palabras, hace que de alguna manera sea el propio lector el que cree su historia, es decir sea participe activo de esa historia, acercando al niño al mundo de la lectura.

    Elsa Fraile Tiemblo
    Magisterio de Primaria de la UAM
    Grupo: 222

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  4. Esta es una muy buena forma de situar al niño en el mundo en el que vive, y darle a conocer las cosas más importantes. Con este tipo de libros, el niño puede aprender diversas materias sin necesidad de estudiar esos libros que tan poco gustan.

    También podemos romper muchos estereotipos que hay en la sociedad puesto que las ilustraciones nos ofrecen esta posibilidad. Es el ejemplo de poner un balón a una niña, y una casa de muñecas al protagonista de la historia.

    En definitiva, personalmente opino que estos libros no van a sustituir a los que conocemos tradicionalmente, aquellos cuya letra es apoyada con imágenes, pero como ya he comentado pueden servir de complemento de aprendizaje.

    Jesús Sáez Muñoz
    2º Grado en Educación Primaria
    Grupo: 222

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  5. Con estos libros se puede crear tanto una nueva forma de enseñanza para los alumnos, como una forma nueva de que los alumnos se interesen por la lectura y los libros, porque a partir de ellos pueden crear sus propias historias sobre lo que ocurre en cada paisaje.
    Estos libros sirven también para niños pequeños, es decir, como bien he dicho antes, estos libros pueden servir para que los propios alumnos creen su propia historia en cada paisaje hasta encontrar al personaje.
    - ¿Qué pudo hacer aquí nuestro peregrino?- podría preguntar eso la profesora para conseguir que los niños participaran durante el momento de la lectura del cuento. De esta manera también podemos enseñarles elementos del paisaje que aparezcan dibujados en la historia.
    En definitiva, estos libros se pueden dedicar desde los 4 años, hasta los 10 años como bien se dice en el artículo; son libros que merecen la pena incluir como material escolar para la enseñanza.

    Comentado por:
    Paula Martín Castillo.
    2º Infantil. Grupo 211.

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